¡Huye! o enfrenta el horror

¿Como empezar? Ese día.... Cierto, ustedes no saben de qué día estoy hablando.

El día del torneo Kuroi Kumo yo había despertado sumamente temprano, recuerdo que al abrir mis ojos, la luna aun brillaba en lo más alto de su recorrido nocturno, de hecho, estoy segura de que fue ella quien me despertó. Con algo de curiosidad caminé hacia la única ventana de mi habitación y al abrirla pude notar que la noche era demasiado silenciosa para mi gusto,  ni siquiera el canto de las lechuzas, que suelen habitar el bosque Nara, se escuchaba y el aire se sentía demasiado espeso.
Definitivamente algo andaba mal. 

Esa mañana después de desayunar en compañía de mi hermana y abuela salí a entrenar. Mi lugar favorito era el segundo claro del bosque Nara. Empece con lanzamientos de kunais, algo que me parecía sumamente sencillo pero que debía seguir perfeccionando, al pasar lo que para mi fue un hora, me senté cerca del pequeño lago que había allí para centrarme en mi objetivo principal, seguir aumentando mi reserva de chakra, sin embargo, fui interrumpida por un leve y fugaz silbido y al abrir mis ojos, me percate de que había una flecha con un pergamino clavada en un árbol.

"Esta tarde se dará inicio al torneo Kuroi Kumo y todos deben asistir"

Regrese a mi casa en busca de alguna explicación, pero ni mi abuela, ni mi hermana me dijeron algo. Sin embargo, aun recuerdo claramente las palabras que mi abuela dijo cuando salia en dirección al torneo y aunque en ese momento no entendí el porque de ellas, ahora soy consciente de su importancia.

confía siempre en la luna

Las palabras de Kayo sensei al iniciar el torneo fueron mi señal de alerta, el miedo reflejado en sus ojos no era normal y la muerte de Kimimaro fue mi confirmación de que algo muy malo estaba pasando. Por eso, cuando el mismo Kayo sensei nos ofreció la oportunidad de escapar yo no dude en aceptar, después de todo yo tengo un objetivo que cumplir y no me podía permitir arriesgarme a perder mi vida en un torneo.

Con la ayuda de nuestro sensei y de un extraño ninja de la niebla quien nos envolvió en un jutsu de neblina estábamos logrando escapar, y digo estábamos porque cuando nos acercamos al gran portón de entrada de Konoha, esta niebla se disipó y tres hombres que estaban en la salida nos emboscaron.

En ese momento Sokai, una de mis compañeras, se adentro en el bosque con una actitud bastante extraña a mi parecer, por lo tanto, movida por la curiosidad la seguí, asegurándome de que no se percatara de ello.

Desde los árboles me pude dar cuenta de lo que sucedía, de como aquellos hombres de apariencia repulsiva se enfrentaban a mis compañeros, he de admitir que quede gratamente sorprendida con los justus de Kazuki y Keji. Sin embargo, ver al ninja de la niebla sujetado por uno de esos hombres fue como volver a la realidad de lo que sucedía, pero aun así mientras mis compañeros se enfrentaban a ellos con valentía yo permanecía escondida, porque sabia que es momento yo no podia hacer nada... Ya ni siquiera sabía dónde estaba Sokai.

Fue cuando mis compañeros derrotaron a los tres hombres que yo salí de entre los árboles y concentrado una cantidad de mi chakra sobre sus tenketsu ayudé al ninja de la niebla, quien para ese entonces se encontraba bastante grave de salud, aunque no pude lograr su recuperación completa en el primer intento.

Empezamos a correr fuera de konoha, sabíamos que debíamos apresurarnos si deseábamos escapar. Tras unos minutos sentí el suelo temblar y me percaté de que algo se acercaba y de que ese algo dejaba un rastro que hacia que el suelo de derritiera o algo por el estilo. Sabía que estábamos en graves problemas y decidí utilizar mas de mi chakra para terminar de curar, esta vez por completo, al ninja de la niebla.

Dudaba de que podía hacer y fue justo en ese momento cuando él se paro frente a nosotros con la intensión de que mientras nosotros huíamos él se enfrentara a esa cosa gigante que ahora sabiamos era una babosa. Aunque, por lo menos yo no tenía la intención de seguir sin quien nos habia estado protegiendo con su niebla y al parecer mis compañeros tampoco porque todos nos quedamos junto a él.

Desde el principio el tamaño de la babosa y sus colores me parecieron extraños, lo mas seguro es que se tratar de una invocación y de ser eso cierto, entonces había alguien siguiéndonos. Uno de mis compañeros lanzo un papel bomba a la babosa y aunque el kunai que este poseía no le hizo daño, si lo hizo el fuego de la explosión, eso solo quería decir que aunque no pudiéramos utilizar armas contra ella, si podíamos usar nuestros jutsus.

Descubrimos que efectivamente había alguien tras nosotros, pero también que la fortaleza de esta persona era su invocación, por lo tanto, nuestro mayor obstáculo seguía siendo la babosa. Como sabíamos que los jutsus eran efectivos, empezamos a utilizar el fuego contra esta, haciendo explotar papeles bomba.

Por otro lado, el ninja de la niebla que nos había estado ayudando, empezó a crear una neblina salada que fue de mucha ayuda al momento de derrotar esa invocación. Pensábamos que todo estaba ganado, cuando de repente esta babosa empezó a desprender otras pequeñas babosas. Recordé entonces lo que alguna vez mi madre dijo “cuando te encuentres en problemas y no reine la luna, usa la naturaleza a tu favor” y así lo hice, yo sabia que en aquella zona habitaban una gran cantidad de chicharras que cuando explotaban producían un agudo sonido, tal vez eso nos ayudaría, y lo intenté. Utilicé la rotación celestial para crear una onda que lograra hacerlas explotar y aunque lo hice sin estar completamente segura, funcionó, con ello más algunos papeles bomba logramos derrotar tanto a las babosas pequeñas como a la persona que las invocaba.

Ahora viene lo que pasó después de ello ¿recuerdan a Kayo Sensei? ¿La persona que nos había dado la idea de escapar? Pues no era Kayo Sensei, era una especie de sustitución de él, el caso es que de un momento a otro a quien creíamos que era Kayo Sensei se le empezó a resquebrajar la piel y quedó una nueva figura, alguien que jamás había visto. Esta persona llevó ambas manos a sus bolsillos y al sacarlas, de lo que parecían ser bocas en sus manos, surgió una gran ave blanca, ave que arrancó la cabeza del ninja de la niebla.  Sin embargo, segundos más tarde, esta misma ave explotó gracias a unos palos de madera que surgieron en la tierra de la nada, recuerdo que esta explosión fue tan fuerte que su onda nos alejó mucho de donde nos encontrábamos inicialmente. 

Cuando me recuperé un poco del golpe de la explosión y logré ponerme de pie, Kazuo nos propuso volver a Konoha, entonces recordé que mi abuela y mi hermana estaban allí y sin dudarlo acepté mientras que Soukai decidió irse por su cuenta.

Habíamos empezado a correr, pero no avanzamos demasiado cuando fuimos rodeados por una enorme cantidad de aves pequeñas, que al parecer estaban hechas de mismo material que el ave gigante que mencioné anteriormente y a cada paso que intentábamos dar estas empezaban a explotar haciéndonos retroceder. He de admitir que por un momento me estaba empezando a desesperar, porque tenía que regresar a Konoha. Entonces, se me ocurrió usar el jutsu de fuego de Kazuo para que esas aves explotaran y mi rotación celestial para protegernos de la explosión, así podríamos escapar. Era algo muy arriesgado, si mi rotación tenía algún fallo no solo yo, también mis compañeros podrían morir. Para mi suerte todo salió a la perfección.

Habíamos empezado a correr, no llevábamos mucho haciéndolo cuando Soukai apareció ante nosotros, se que intento hacer una invocación pero esta por alguna razón fallo, si de algo estaba segura era que en este momento su objetivo era matarnos. De un momento a otro, de la tierra surgió una gran pared de madera y escuche la voz de ese ninja, que estaba hablando con quien creíamos era Kayo Sensei decirnos que huyéramos de allí, cosa que mis compañeros no dudaron en hacer. Si embargo, yo me quede unos minutos más para bloquear los puntos de chakra de Soukai y después empecé a correr. Había avanzado demasiado, ya lograba ver a mis compañeros mas adelante, pero una gran sobra empezó a cubrirme y al mirar hacia el cielo pude ver a Sokai en una gran ave, similar a la que había matado al ninja de la niebla, un leve destello me aviso de que algo un kunai se dirigía hacia mi y aunque logre esquivarlo, el papel bomba que venia en este si me hizo daño.

Hubo un momento en el que Sokai utilizo un jutsu de sustitución, reemplazando su cuerpo por un tronco y dejo que ave gigante callera directamente sobre Kazuki. La explosión de esta misma, impacto directamente a mi compañero. Yo empecé a correr hacia él, encontrándolo inconsciente y con el hueso de su mano izquierda roto, casi a punto de perforar su piel, por lo que decidí utilizar mis habilidades medicas, para sanarlo. He de admitir que tenía muchas dudas sobre si iba a funcionar la curación y grande fuer mi sorpresa, al ver que había logrado curarlo por completo, incluso el hueso roto regreso a su lugar. Cuando Kazuki recupero la conciencia, empezamos a correr hacia Konoha y aunque a mi me hubiese gustado quedarme a enfrentar a Soukai, era bastante consiente de que mientras el obtuviera ayuda de es chico de ojos azules, no podría hacer nada en su contra.